Si no ha notado ningún otro síntoma, puede ser normal de acuerdo al clima en el que se encuentre y al nivel de actividad o juego deportivo del niño. En su próxima cita de crecimiento y desarrollo cuénteselo al médico para que él luego de un examen físico determine si es necesario solicitar un examen de glicemia y citoquímico de orina que pueda ayudar a aclarar si existe alguna razón para preocuparse.