Es necesario iniciar con la implementación de rutinas que mejoren la calidad e higiene del sueño de su hija, por lo cual es importante:
Asegurarse que antes de dormir su hija o niño no presenta hambre.
Evitar el consumo de alimentos como café, gaseosas, chocolates o dulces.
Evitar actividades intensas 1 a 2 horas antes de la hora de dormir.
Si su hija o niño tiene problemas para conciliar el sueño, es bueno hablar con él o ella, para que le indique por qué. Una comunicación fluida entre padres e hijos favorece a que el niño se sienta seguro.
No asociar dormir o irse a dormir con situaciones que generen miedo al niño.