Las disfunciones sexuales asociadas al uso de antidepresivos (Tricíclicos, IMAO, ISRS) son bastante frecuentes. La incidencia de los diferentes antidepresivos en la esfera sexual, especialmente los tricíclicos puede disminuirse o evitarse con intervenciones que van desde la reducción de la dosis o el cambio del medicamento con otros antidepresivos que tengan menores efectos secundarios en la respuesta sexual. Si los síntomas persisten, consulte a su médico para evaluar posibles cambios.