Sí, ambos protegen el estómago, controlando la cantidad de ácido que se produce. La diferencia radica en la forma cómo controlan la producción de ácido (mecanismo de acción y categoría a la que pertenecen) y en que el omeprazol ha mostrado mejores resultados, en el corto plazo, para el manejo de las úlceras gastrointestinales.
A continuación te contaré un poco más sobre cada medicamento:
* El omeprazol es un medicamento que hace parte de un grupo conocido como inhibidores de la bomba de protones (IBPs), este medicamento reduce la cantidad de ácido que produce el estómago. Sirve para el tratamiento de enfermedad por reflujo gastroesofágico, úlcera duodenal, úlcera gástrica, úlcera por helicobater pylori (requiere además manejo anitbiótico), ulceras causadas por anti-inflamatorios no esteroideos y síndrome de Zollinger -Ellison. Los efectos secundarios más frecuentes son: dolor de cabeza, dolor de estómago, diarrea, estreñimiento, gases, náuseas y vómitos. No se debe tomar si se es hipersensible al medicamento o a sus componentes, tampoco si se está tomando un medicamento llamado Nelfinavir. La dosis del medicamento depende de la enfermedad a tratar y de su gravedad.
* La ranitidina pertenece a un grupo de medicamentos denominado antihistamínicos que actúa sobre los receptores de histamina (una hormona) ubicados en la mucosa gástrica, al actuar sobre esta hormona se reduce la secreción de ácido gástrico de manera general, pero también disminuye la producción de ácido gástrico cuando hay estímulos externos por alimentos. Este medicamento sirve para el tratamiento de la úlcera duodenal, úlcera del estómago, enfermedad por reflujo gastroesofágico y síndrome Zollinger Ellison. Los efectos secundarios que se pueden presentar durante la toma de este medicamento son: diarrea, constipación, náuseas, vómito, dolor abdominal si cualquiera de estos síntomas es intenso, se debe acudir al médico. No se debe consumir si se es alérgico al medicamento o a alguno de sus componentes, tampoco si se tiene una enfermedad llamada porfiria. Se debe usar con precaución en pacientes con enfermedad hepática o renal. La dosis del tratamiento depende de la enfermedad a tratar.
Tanto la ranitidina como el omeprazol solo deben usarse en el embarazo y la lactancia si el médico considera que el beneficio supera los riesgos.