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Lo que mencionas es algo bastante frecuente, se debe a que dentro de la cavidad abdominal existe un remanente de tejido que se encuentra unido al ombligo y a otros tejidos del abdomen y nervios de dicha cavidad generando la sensación de molestia o ganas de orinar. Ese remanente corresponde a la arteria umbilical que estaba presente durante la vida fetal.
Es algo completamente normal y le pasa a muchas personas, por lo que no hay nada de qué preocuparse.