Las abrasiones o lesiones en la lengua son debidas a múltiples etiologías como: causas alimentarias irritantes o ácidas, mordeduras en la lengua o lesiones por fricción con la ortodoncia, medicamentos, tabaco, alcohol, estrés. Debe tratar de restringir el consumo de alimentos abrasivos, ácidos, picantes, evitar las nuevas lesiones mecánicas, realizar un adecuado lavado dental, tomar líquidos fríos y refrescantes para aliviar la sintomatología bucal. El cuadro clínico generalmente se autoresuelve en más o menos 10 días.