Debido a que el bebé no tiene un sistema inmune desarrollado, no tiene las defensas necesarias para luchar contra una infección o para prevenir que se de la infección en primer lugar. Si un bebé atraviesa el canal del parto hacia una vagina con infección, probablemente esta infección afectará al bebé también.
Es probable que si la infección es severa o no ha podido ser controlada antes de la fecha probable de parto, el médico decida que la mejor opción para asegurarse del bienestar del bebé es la cesárea. Dependiendo del tipo de infección, si el bebé es expuesto, podría desarrollar infecciones en los ojos, la boca, las vías respiratorias, y demás sitios de contacto.
Lo mejor es asistir a los controles prenatales para detectar y tratar exitosamente las infecciones antes de la fecha esperada de parto, para disminuir al máximo cualquier riesgo que se pueda presentar.