La depilación con dispositivos de luz (láser,IPL) es recomendable principalmente en pacientes que presentan foliculitis con los demás dispositivos de depilación como cuchilla, cera o hilo, para aquellas personas que desean reducir o eliminar el vello corporal ya sea por belleza o por salud (hiperhidrosis, hipertricosis, hirsutismo).
Es importante tener en cuenta que los pelos muy claros o rojos tiene poca captación por la energía láser y las pieles muy oscuras pueden presentar quemaduras por mayor captación de energía por los melanocitos de la piel.
Independientemente de la zona a depilar se debe evitar la depilación por arrancamiento (pinzas, cera, hilos) antes y durante el tratamiento de depilación ya que esto afectaría la efectividad del tratamiento; además, hay que evitar broncearse días antes y días después del tratamiento, ya que esto predispone a quemaduras por el láser; evite usar lociones con alcohol en las zonas tratadas, su uso puede irritar el área.
Con respecto a la depilación del área genital y las axilas, se debe tener presente que al ser áreas sensibles, es más fácil presentar reacciones reacciones adversas.
La piel de las piernas es más resistente por lo que las probabilidades de presentar reacciones adversas es menor.
Siempre consulta al especialista en medicina estética para una valoración previa, hacer una historia clínica completa y descartar enfermedades fotosensibles o lesiones activas que contraindiquen el uso del láser, además que sepa manejar los parámetros adecuados del láser y así disminuir riesgos.