Luego de la depilación es normal presentar un eritema leve y sensación temporal de calor en la zona tratada.
PERO un enrojecimiento severo, dolor, calor que persiste por más de unos minutos, presencia de ampollas, cambios en la coloración de la piel, se considera un efecto adverso y generalmente sucede por una mala utilización del equipo y por un personal no calificado.
La utilización de los equipos láser son de competencia médica y no debe delegarse a personal no calificado como esteticistas o enfermeras.
Siempre consulta al especialista en medicina estética para una valoración previa, hacer una historia clínica completa y descartar enfermedades fotosensibles o lesiones activas que contraindiquen el uso del láser.