Es importante conocer más a fondo tu historia clínica, incluyendo el tiempo de aparición de las lesiones, síntomas asociados (fiebre, pérdida de peso, pérdida del apetito, infecciones frecuentes, antecedentes..) y revisar los exámenes que te han hecho para evaluar si existen otras causas que expliquen tu cuadro actual que no hayan sido estudiadas. También es necesaria una valoración médica presencial en las que un examen físico completo nos oriente más para poder establecer un diagnóstico y brindar un manejo adecuado y oportuno.
Lo más probable es que se trate de adenomegalias (inflamación de los ganglios), en cuyo caso habría que realizar estudio de citomegalovirus (CMV), virus de la hepatitis B (HBV), virus de la hepatitis C (HCV), toxoplasmosis, tuberculosis e incluso procesos neoplásicos (tumores), entre otros. Sin embargo, puede tratarse de otro tipo de lesiones como abscesos, nódulos, masas, entre otros.
Si ya cuentas con algunos estudios y no has podido ser diagnosticada, te recomiendo una valoración con el médico especialista en medicina interna. El podrá revisar tus estudios, solicitar imagenes y laboratorios nuevos en caso de ser necesarios para reducir las posibilidades diagnósticas e iniciar tratamiento (si lo requieres); incluso podrá remitirte a otra especialidad (en caso de ser necesario).