Sí. Los síntomas de la primoinfección pueden manifestarse a la semana 5 o 6 de un contacto. Una prueba de cuarta generación 21 días luego del contacto, descarta la infección con alto grado de certeza. Si los contactos son repetidos o las conductas de riesgos (como sexo anal o uso de drogas intravenosas), se recomienda repetir la prueba un mes después de la primera.