Si el dolor es tipo presión, dificulta la respiración, se va hacia la espalda, los brazos o la mandíbula y genera sensación de mareo y sudoración, es peligroso y debe asistir por urgencias al médico. Otros tipos de dolores como punzadas, cólico o ardor, suelen deberse a problemas gastrointestinales como la gastritis, la esofagitis y el colon irritable y no representan la misma gravedad. Si está recibiendo manejo para el trastorno de ansiedad, debe continuarlo. Otras recomendaciones son consumir alimentos fraccionados, bajos en grasas y en azúcar y mantener una adecuada hidratación. Si los síntomas persisten a pesar de las recomendaciones, es aconsejable que visite a su médico de forma presencial para ampliar estudios.