La terapia fisica es el componente más importante del tratamiento del genu recurvatum.
Al presentar una hiperextension de las rodillas mayor a 180 grados, se genera un desbalance muscular generando dolores musculares y alteraciones en la marcha.
La meta de la terapia fisica es el fortalecimiento muscular de los miembros inferiores para lograr compensar el ángulo patológico.
Dependiendo de la causa del genu (de los huesos o de los ligamentos) se podría plantear otro tipo de tratamientos mas invasivos.
Sin embargo al presentar esta deformidad la fisioterapia es para acompañamiento a lo largo de la vida del paciente