Esto puede llegar a ser subjetivo. Sin embargo, es muy necesario que sea valorado por su médico pediatra ya que la aparición anormal de hoyuelos lumbosacros o desviaciones de la línea que pueden confundirse con la hendidura interglútea podrían llegar a ser signos de disrafismo espinal e incluso de lipoma intrarraquídeo, respectivamente.
Por supuesto, lo más probable es que se trate únicamente de una variación anatómica normal pero ante la apreciación lo adecuado es la valoración presencial. Quedamos atentos. No olvides calificarnos.