El principal riesgo de los miomas uterinos son las alteraciones del ciclo menstrual (sangrados anormales o ausencia de la menstruación), dolor pélvico tipo cólico y problemas para conseguir un embarazo.
El riesgo de malignización de un mioma es del 1 %, que es similar al riesgo de desarollar cancer de una persona que no tiene miomas.
Los miomas pueden crecer más hasta que la mujer entra en la menopausia, después de este periodo tienden a disminuir o a mantenerse del mismo tamaño.
Las indicaciones de cirugia usualmente son la presencia de síntomas severos y si ha sido imposible conseguir un embarazo. En la mayoria de las mujeres basta con saber que los tiene y un seguimiento imagenológico ocasional pues no representan un gran riesgo para la salud.