Depende de como sea tolerado por el organismo, puede que se sienta como si se debilitara el cuerpo.
Los efectos adversos de la Azitromicina se manifiestan como náusea, vómito, diarrea, dolor de cabeza, dolro abdominal, mareo, alergia, pérdida de apetito, orina oscura, incluso debilidad muscular.
Es importante que si no tienes ninguno de estos síntomas debes continuar el tratamiento según haya sido indicado por el médico. No debes automedicarte.
Esperamos haberte orientado.