La elección del tratamiento antibiótico para la infección del tracto respiratorio superior e inferior va a depender del origen etiológico que estemos sospechando. Para las infecciones virales no está indicado el manejo antimicrobiano. Si sospechamos de una infección tipo bacteriana por gérmenes comunes se da tratamiento con inhibidores de la B-Lactamasa como las Penicinilas (Amoxacilina) al igual que Cefalosporinas como el Cefuroxime. Si por el contrario se sospecha de infección por gérmenes atípicos se dan Macrólidos como Eritromicina, Azitromicina.