Existen al menos dos razones principales por las que no debe utilizarse: 1) la toalla higiénica no controla el sangrado de la herida ni tiene ninguna función en el proceso de cicatrización. 2) Puede predisponer a infecciones en el sitio dado que su tamaño supera el de la herida y como tiene una superficie diseñada para absorber líquidos, esta acumula la humedad y sudoración de la piel alrededor y facilita que se contamine la herida.
Si usted presenta una herida abierta, debe hacerla revisar presencialmente por el médico para asegurarse de que se tomen medidas adecuadas en el proceso de curación y cicatrización. Si se trata de una herida por una cirugía, debe ser valorada por el médico si la herida presenta sangrado, calor o enrojecimiento en la zona y producción de pus.