Existen diferentes causas que causan disminución del deseo sexual o dificultad para la erección, y por lo tanto distintos tratamientos.
Lo primero es saber que la obesidad, el tabaquismo, la tensión, el azúcar, el colesterol y los triglicéridos elevados pueden afectar el proceso natural de erección por lo que te recomiendo debes inicialmente adoptar medidas de dieta saludable, ejercicio y hacerte un chequeo general para asegurarte de que tengas un adecuado control de estos factores.
Si estos factores están controlados, te recomiendo consultar con tu médico para realizar un estudio más completo y determinar si el tratamiento requiere pastillas o no.