Los dos síntomas principales son dolor pervivo y sangrado vaginal.
El sangrado vaginal puede ir desde un manchado escaso hasta sangrado profuso con presencia de coágulos, la cantidad de sangre usualmente no se relaciona con el pronostico del embarazo, es decir sangrar poco o mucho no define si es un aborto o no.
El dolor pélvico usualmente es tipo cólico, puede ser constante o intermitente e incluso como una presión.
La presencia de sangrado en una mujer embarazada amerita valoración médica, si es tú caso debes dirigirte inmediatamente al servicio de urgencias.