Los hematomas generalmente se presentan por una lesión traumática previa, es decir por un golpe. En algunas ocasiones puede ser por problemas de plaquetas o trastornos de la coagulación, que se debería estudiar por la consulta externa. En caso de que el hematoma duela, crezca, o empiece a ponerse rojo o con secreciones, debería acudir por urgencias