Todos producimos lágrimas durante el día para mantener lubricado el ojo, en momento en que estén líquido aumenta puede ser por dos motivos; uno que existe algún irritante que hace necesario mayor lubricación (ambiental, alérgico o aplicado), suele acompañarse más de ojos rojos y secreción.
La segunda razón es porque el conducto por donde drenan las lágrimas esté obstruido (conducto lagrimal). Esto último es muy frecuente en los niños más pequeños, y para esto puede realizarle masaje en forma circular en la parte interna (la parte más cercana a la nariz), diariamente.
Es importante que programes una cita con su médico tratante para vigilar su crecimiento, desarrollo, esquemas de vacunación, así como la evolución de sus ojos.
No debes aplicar ningún tipo de liquido, ni cremas en sus ojos.