Es normal que tengas este tipo síntomas por lo menos durante el primer mes post operatorio.
Mientras culmina el proceso de cicatrizaciión, puedes continuar un poco inflamada, y con sensación de hormigueo en el lugar del procedimiento.
Lo que no es normal, es que se ponga muy rojo, se suelten los puntos, salga pus, la inflamación empeore o te de fiebre, en este caso, debes asistir por el servicio de urgencias.