Las bebidas energizantes no son aconsejables, no por la cantidad de azúcar que contengan, sino porque son estimulantes que aceleran el ritmo cardíaco y pueden llevar incluso a mayor fatiga o cansancio después de pasado el efecto, y además predisponer a taquicardia y arritmia. No es recomendable tomarlas, ni en ayunas ni con alimentos.