Estos signos radiográficos son muy sugestivos de dísplasia congénita de cadera, una enfermedad en donde la articulación de la cadera y la cabeza del fémur no se desarrollo adecuadamente. Sin embargo este diagnóstico debe realizarse acompañado del examen físico y otros hallazgos y mediciones en la radiografía de cadera.
Debes solicitar una valoración con su pediatra u ortopedista infantil para confirmar diagnóstico y definir el manejo adecuado.
Para su edad recuerda debe tener controles regulares con su médico para evaluar crecimiento y desarrollo, así como su esquema de vacunación.