Es posible que hayas dislocado el dedo, no es necesario un golpe ya que ocurre más frecuentemente con una mala posición o un mal movimiento del dedo. Para confirmarlo es necesario que asistas a tu médico para que haga un examen físico de tu pie, revisar movilidad, fuerza o deformidades y de ser necesario se realizará una radiografía. La terapia física ayudará a mejorar los síntomas de tu pie y recuerda siempre utilizar calzado cómodo y de tu talla para evitar molestias.