Si es habitual que posterior a la actividad sexual puedan generarse infecciones de la vía urinaria o la orina, ya que durante el acto por el roze que se presenta de los genitales y el contacto con fluidos y secreciones mutuas; los microorganismos aprovechan este espacio húmedo y movimiento para ingresar por la uretra (la cual es corta en las mujeres a comparación de los hombres) y puedan generar una infección en la vejiga o cualquier porción de la vía urinaria.
Ahora bien, para evitar que las infecciones urinarias no se vuelvan recurrentes por este factor es recomendable una vez culminado el acto sexual; ir al baño a orinar, con el fin de barrer cualquier microorganismo o bacteria que quiera ingresar o se encuentre a su entrada, y/o en su defecto realizar un baño o higiene de lo genitales. Por otro lado otras maneras de evitar infecciones urinarias a repetición es:
- Hidratación diaria abundante
- El jugo de arándanos o blueberries se ha combate y previene infecciones de la orina, al igual que la toma de vitamina C
- Evitar tener que aguantar para ir al baño a orinar
- Adecuada limpieza e higiene genital
- Evitar el uso de protectores o toallas con frecuencia
- Uso de papel higiénico personal, entre otros.