Si esto se da pese a una buena higiene oral, lo primero que debe descartar es que hayan lesiones en la boca que estén causando el problema como abscesos, enfermedad gingival o caries que no son evidentes a menos que sea revisado por un odontólogo. Una vez descartada esta posibilidad, puede tratarse de un problema de la via digestiva y esto debe ser valorado por el médico presencialmente y con imágenes diagnosticas que lleven a identificar la causa de base y luego dar un tratamiento adecuado.