La ecografía es un buen método para diagnosticar embarazos. Es un poco más rápida la prueba en sangre y entre las 2 hacen un complemento perfecto. Se puede hacer hacer la ecografía, pero si el embarazo lleva menos de 7 días puede pasar desapercibido. Después de 15 días de producida la implantación, hay más posibilidades de que la ecografía muestre el saco gestacional.