Es imposible determinar que un gánglio inflamado se debe a VIH solo por sus características, ya que en una persona las adenopatías pueden ser blandas y móviles y en otra duras y poco flexibles y ambos pueden estar infectados por VIH.
Usualmente en las infecciones (independiente del tipo) los gánglios suelen ser blandos y móviles, mientras que los gánglios asociados a procesos tumorales suelen ser duros e inmóviles.
El diagnóstico de VIH únicamente puede ser realizado mediante las pruebas de detección del virus, no existen signos clínicos que por si solos indiquen este diagnóstico.