Si son de color rojo pueden corresponder a unas alteraciones denominadas papilas, que son elevaciones de la conjuntiva tarsal como respuesta a algunas alergias, son bastante frecuentes y por lo general si no hay sintomas y son de pequeño tamaño no traerán ninguna consecuencia para el ojo, usualmente generan picazón.
Si son de color blanco, podría tratarse de concreciones conjuntivales que son acúmulos de calcio es respuesta a inflamación crónica, igualmente son frecuentes y no son graves.