No, los cambios que describe no aparentan ser secundarios a la gestación.
Es posible que alguna de las diferencias que refiera se relacionen con alteraciones posturales o condiciones como la escoliosis.
Sin embargo, tenga en cuenta que es normal que exista algún grado de asimetría corporal, lo cual no implica mayor peligro o anormalidad.
Si considera que este tema genera un estrés o ansiedad importante, si constantemente identifica su cuerpo como anormal o le parece que es evidentemente diferente, a pesar de no ser percibido por otras personas; sería importante que acuda a control médico para descartar alteraciones en la percepción de la imagen corporal.