No es necesario verificar el éxito de la operación porque este es evidente antes de que termine el procedimiento quirúgico, pero se debe seguir en controles periódicamente con el ginecólogo, especialmente si hay sintomatología asociada como dolor pélvico o sangrados anormales. Es preferible abstenerse de relaciones sexuales en el período inmediato al procedimiento y al menos hasta 10 días o 2 semanas.