Una persona puede tener placas de ateroma sin necesidad de estar presentando el colesterol elevado. Las placas generalmente no se forman de la noche a la mañana, sino que toman años para formarse.
Desde niños se pueden empezar a formar las placas. Los hábitos de vida poco saludables promueven a la formación de estas. Usted puede tener una o varias placas ateromatosas sin que le haya sido diagnosticado el colesterol alto. Los estilos de vida poco saludables, como el sedentarismo, el tabaquismo, la mala alimentación, entre otros factores, pueden promover la formación de placas de ateroma.
En una persona con colesterol alto, sin otros factores de riesgo, puede haber ya una placa de ateroma, que se ha venido formando desde hace mucho tiempo.
Lo mejor que se puede hacer para evitar que se sigan formando estas placas es tener una alimentación balanceada, incorporando en ella frutas y verduras frescas, limitando el consumo de alimentos procesados y muy condimentados o altos en grasas, y teniendo una rutina de ejercicios diaria.
Debe consultar con su médico para determinar si requiere tratamiento además de los cambios en el estilo de vida para disminuir los niveles de colesterol.