La mayor parte de brotes en niños suelen ser ocasionados por virus sin mayor complicación.
Cuando estos generan comezón es importante que corte las uñas del menor para prevenir infección por rascado, puede aplicar lociones con calamina, realizar baños con agua tibia, en ocasiones la aplicación de pequeñas cantidades de fécula de maíz puede disminuir la irritación y en algunos casos el uso de antihistamínicos, que deben ser preferiblemente formulados por el médico.
No olvide acudir a control médico para revisión y descartar condiciones infecto-contagiosas como la varicela que requerirían medidas especiales de precaución o aislamiento, sin tratarse de algo grave.