Al manipular los dedos el espacio entre las articulaciones crece, por lo que los gases que se disuelven en el liquido sinovial (liquido que cubre y protege a las articulaciones) forman burbujas; cuando las pequeñas burbujas se unen, forman otras de mayor tamaño que se revientan cuando entra mas fluido entre esos espacios abiertos y en ese instante es cuando se escucha el peculiar chasquido de los dedos. El dolor puede ser debido a que al reventarse dichas burbujas hay un pequeño roce entre los huesos.
Los últimos estudios acerca del tema, han demostrado que esta acción no predispone a la aparición de artritis, ya que esta va de la mano con otros factores ya establecidos como la edad, historia de la condición en la familia, accidentes previos y una vida entera de usar las manos en labores pesadas.
Espero haber aclarado tu duda, ante cualquier nueva inquietud estaremos atentos.