Sí, los Linfomas (tumores derivados de las células de defensa) suelen tener múltiples regímenes de Quimio o Radioterapia dirigidos a la destrucción de este tipo de células malignas de acuerdo a su localización, así como a la curación de la enfermedad.
No obstante, estas terapias no atacan específicamente las células malignas por lo que durante el tratamiento aparecen múltiples reacciones adversas (vómitos, alteración en sustancias como sodio, potasio, entre otros, caída del cabello, lesión de órganos vecinos al campo de radioterapia, etc).
Además el resultado del tratamiento se puede dividir en:
1. Un porcentaje de los pacientes que padecen esta patología logran tan solo la remisión (se pone en reposo el tumor), mas no logra la curación lo que empeora el pronóstico del mismo.
2. Otro grupo de pacientes se curan y no vuelve a aparecer el tumor (escenario ideal)
3. Una pequeña población de pacientes no responden al tratamiento.
Teniendo en cuenta lo anterior es importante recalcar que cada paciente debe ser evaluado individualmente para poder determinar la mejor opción de manejo disponible, así como su pronóstico esperable con cada terapia.