La tos es un síntoma poco común de un linfoma y está condicionado a la inflamación de los ganglios ubicados en el cuello los cuales a su vez causan presión y molestias en la tráquea produciendo tos. La tos podría llegar a ser persistente mientras los ganglios no disminuyan de tamaño lo cual suele estar condicionado a si se recibe un tratamiento adecuado.
Algunos fármacos inhibidores de los centros de la tos podrían resultar útiles pero es necesario dar tratamiento específico al linfoma para lograr mejorar la sintomatología.
Espero te resulte útil.