Esto no es un síntoma específico de ninguna enfermedad. Puede tratarse desde un cuadro de deshidratación permanente porque no consume agua suficiente durante el día, hasta un problema de niveles elevados de azúcar que hacen que se aumente la necesidad de líquido en el cuerpo. Intente tomar alrededor de 6 vasos diarios de agua y si pese a este aumento de líquidos sigue con los mismos síntomas, acuda al médico general para una valoración presencial y medición de sus niveles de azúcar.