El tono general de la piel se va recuperando lentamente después de una quemadura solar, como parte de la recuperación del tejido que recubre la piel.
Si hay manchas o pecas, estas no desparecen solas, en este caso es necesario tratamiento específico.
Pero hay que tener en cuenta que para la recuperación del tono de la piel, se deben tomar medidas preventivas, es decir: evitar nuevas quemaduras de sol, usar ropa que cubra las zonas expuestas, usar sombrillas o gorros para cubrir la cara y una medida sumamente importante es el uso de un bloqueador solar factor superior al 50, a diario en la mañana y al medio día.
Si no sigues las recomendaciones la piel continuará expuesta a los rayos solares y continuará quemándose día a día y sufriendo daño solar.