Es muy recomendable el inicio del ejercicio pero de forma inteligente y graduada.
Dentro del proceso de rehabilitación de un procedimiento ortopédico, el inicio de ejercicio es necesario para complementar una buena recuperación. El ejercicio le permitirá junto a la rehabilitación realizada, aumento de la masa muscular, proceso de consolidación y fortalecimiento óseo, migración de células que le ayuden con la generación de mielina para la consolidación del nervio intervenido.
Lo importante es que empiece a realizar sesiones de ejercicio, pero ningún tipo de deporte de contacto (ejemplo: basquetbol, rugby, tenis), según su tolerancia le vaya permitiendo y simulando las sesiones de terapia (los ejercicios que le enseñaron durante) para que el cuerpo y su extremidad se vayan acostumbrando; la piscina, el yoga, las salas de musculación son buenos inicios.
Recuerde continuar con seguimiento por su médico cirujano hasta que se considere necesario.
Un dolor intenso que no mejore con la medicación dada, acumulación de sangre a dicho nivel, nuevas deformidades, enrojecimiento de la piel donde hubo la fractura y la cirugía son signos que le deben hacer pensar en ir a urgencias.
No dude en acudir a nosotros en caso de nuevas dudas o persistencia de estas.