El primer mes tras la colocación del Mirena puedes llegar a tener pequeños cuadros de dolor pélvico tipo cólico. Esto porque el útero se está adaptando a tener un cuerpo extraño en su interior y va a intentar expulsarlo con pequeñas contracciones.La forma del dispositivo no permitirá el egreso del dispositivo y el útero se acostumbrará a su presencia y secreción constante de hormonas. Puede que los movimientos y la actividad física exacerben la sensación de dolor pero tiene que mejorar con antiespasmódicos y relajantes musculares. Si no lo hace, es mejor que acudas a un médico para que te den un tratamiento más fuerte y evalúen que no haya otras anormalidades.