Si bien no se conocen con exactitud los efectos que ocasiona la tinta empleada para hacer los tatuajes en el desarrollo fetal, el tatuarse implica un riesgo bajo pero existente de transmisión de infecciones como el VIH y Hepatitis B, por lo cual no se recomienda la realización de un tatuaje durante el embarazo y se aconseja esperar hasta después del nacimiento para realizarlo.
Recuerda que la realización de tatuajes deben realizarse en sitios que cumplan con condiciones optimas de higiene, así como el cumplimiento de ciertas normas como la desinfección de la piel con povidona iodada, alcohol u otro desinfectante previa a la realización del tatuaje y la utilización de material estéril descartable que impida la transmisión de enfermedades entre usuarios o infección local.
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