No siempre la diabetes presenta síntomas, sin embargo los más frecuentes y que hacen pensar en este diagnóstico son, aumento de ganas de comer, sed, ganas de orinar frecuentemente, también puede asociarse a cansancio, visión borrosa, dificultad para la resolución de infecciones en piel u otros lugares del cuerpo, entre otros síntomas menos comunes.