La clave para disminuir la probabilidad de una enfermedad cardiaca consiste en llevar unas hábitos de vida saludables. Dentro de estos recomendamos: Incrementar consumo de verdura, consumo de frutas, disminuir consumo de harinas, fritos y grasas, y de bebidas y comidas azucaradas. Hacer ejercicio mínimo 30 minutos al día. Manteniendo estas precauciones y evitando el sobrepeso, se hace menos probable que presente una enfermedad cardiaca. Las probabilidades de sufrir una enfermedad cardiaca dependen principalmente de parámetros antropométricos tales como peso ( índice de masa corporal), edad, niveles de colesterol, triglicéridos, presión arterial, antecedente de tabaquismo y si requiere de medicación antihipertensiva ( para disminuir la tensión arterial). Con ello se calcula un índice que nos arroja el riesgo cardiovascular ( es decir de sufrir de una enfermedad cardiaca). Tenga en cuenta los signos de alarma de dolor torácico previamente mencionados para consultar a urgencias: dolor torácico opresivo irradiado a dorso, miembros superiores, cuello que se asocie a vómito, náuseas, diaforesis. Consulte a su médico tratante para establecer el manejo farmacológico ideal respecto a sus síntomas actuales teniendo en cuenta el antecedente de ansiedad,.