El hambre es la necesidad fisiológica de calorías, agua y sal y es motivada por una mezcla de factores, incluyendo tu dieta, hormonas del apetito y factores emocionales como el estrés, embarazo, síndrome pre menstrual, falta de sueño. Todos estos factores pueden ocasionar que la persona sienta hambre a pesar que ingiere alimentos; por otro lado existe una situación especial al ingerir carbohidratos simples como las harinas, al consumirla se elevan tus niveles de azúcar en la sangre de manera rápida y después hay un descenso de estos niveles; lo que lleva a un hambre intensa por más carbohidratos simples y el ciclo continúa.
Te recomiendo que evites las fluctuaciones en tus niveles de azúcar en la sangre esto lo logras si dejas de consumir alimentos con carbohidratos simples lo más que se pueda. Cambia esos alimentos por carbohidratos con el tipo complejo y llenador, que contiene mucha fibra como: las almendras, manzanas, semillas de chía y pistaches son opciones saludables para alejar la punzada de hambre.