Primero habría que determinar si su pie no tiene problemas articulares que afecten los huesos y/o tejidos blandos del mismo y si no ha tenido traumas recientes que expliquen el dolor. En el caso de que se encuentre algún problema de los anteriores citados, el tratamiento es tratar de eliminar la causa encontrada. Si no se puede eliminar, se debe tratar de controlar lo mejor posible con medicamentos y algunas recomendaciones generales de cuidado. El tratamiento con medicamentos suele incluir AINES y Corticoides por lo general como tratamientos de base. Acuda a su médico de cabecera para que evalúe de forma adecuada su pie y entonces si empezar un manejo que trate de eliminar o al menos controlar sus molestias actuales.