Esto puede ocurrir cuando se hace actividad física extenuante o cuando no hidratamos lo suficiente al hacer ejercicio.
Es importante que si realizamos actividad física, se inicie a la medida de nuestras posibilidades e ir aumentando progresivamente.
También recuerde que es necesario tomar agua antes, durante y después del ejercicio y mantener una dieta balanceada.
Sí a pesar de seguir éstas indicaciones, sigue presentando estos síntomas consulte con su médico tratante.