El sangrado anal se asocia principalmente a hemorroides, usualmente relacionadas con estreñimiento o una alimentación pobre en fibra. Si existe dolor o ardor puede asociarse a fisuras anales, de forma aislada puede ocurrir por pequeñas heridas durante la defecación usualmente pasajeras.
Es recomendable que mantenga una alimentación balanceada rica en fibra (alimentos integrales, frutas y verduras) así como una abundante hidratación. Si estos síntomas son persistentes acuda a control médico.