Primero hay que determinar la causa de la hinchazón para así poder establecer un tratamiento adecuado.
Los ganglios actúan como "escudos" que protegen y combaten infecciones en nuestro cuerpo. Pueden ser el resultado de procesos inflamatorios, degenerativos o neoplásicos. En la mayoría de los casos, la inflamación de los ganglios del cuello está relacionada con cuadros respiratorios (resfriados, alergias, polución ambiental, polvo, humo, productos químicos, insecticidas, entre otros) y suelen desaparecer solos. Sin embargo, si persisten por más de dos semanas, duelen, aumentan en número o tamaño, se propagan a otras regiones (axila, ingle) o se acompañan de otros síntomas como pérdida de peso, pérdida de apetito o sudoración nocturna, es necesario que acuda a su centro de salud para realizar una valoración médica y estudios adicionales.